La calabaza lo tiene todo: está rica, se conserva durante mucho tiempo y tiene unas propiedades nutricionales de lo más interesantes. También es una fuente de hidratos muy combinable; queda bien en salado (la combinación patata- calabaza es ganadora) y en dulce (calabaza- choco hasta el fin del mundo).

Aquí te comparto mi receta estrella de crema de calabaza. Un recurso que uso mucho en la cocina y que me parece muy adecuada tanto para la cena de antes de un entrenamiento intenso (no de una competición), como para la de después.

Te cuento por qué:

  • Tiene una mezcla de hidratos de carbono que me encanta
  • Te sirve para contribuir a la pre-hidratación y para seguir hidratándote después del ejercicio
  • Tiene un perfil de antioxidantes que me parece interesante y que creo que compensan bastante a la patata
  • Su contenido en fibra hace que la absorción de los hidratos sea más paulatina

Para dos- tres personas, los ingredientes son los siguientes:

  • 100 gr de cebolla o de puerro
  • 70 gr zanahoria
  • 300 gr de calabaza
  • 100 gr de patata
  • Curry o cúrcuma y sal al gusto
  • Opcional: un par de flores de coliflor, o incluso apionabo
  • Una cucharada de queso de untar de calidad (también opcional)
  • 300 mL de agua (aprox, en función de lo espesa que te guste. Puedes ser creativo/a aquí sustituyendo por caldo o caldo de miso)

Los pasos, más fáciles imposible:

Para los del vicio gastronómico, te recomiendo primero pelar y trocear la cebolla y dorarla ligeramente en aceite de oliva en la misma olla donde vas a cocer el resto. Puedes saltarte este paso si se te ponen los pelos de punta con el anti-fit del sofrito, pero lo cierto es que si lo haces suave queda riquísimo y te aseguro que no te va a matar.

Luego añades el resto de verduras que hayas elegido, peladas y troceadas, el agua hasta cubrirlas, la sal, y lo dejas hervir hasta que esté cocido (unos 30 min). El último paso será añadir las especias (me encanta con curry o con cúrcuma y un toque de pimienta negra), si lo deseas el queso de untar y batirlo todo hasta que quede finísimo.

El topping de semillas de calabaza ya es estratosférico, y aquí mi opción favorita: añadir en el último momento alga wakame hervida a parte. Las que más me gustan por ser gallegas son estas. Ya sabes que no es publi, es que me gusta.

Disfrútalo, porque es rico, de temporada y además lo puedes congelar. Probablemente nunca antes dar (o que te den) calabazas haya sido tan placentero.

Si la haces, puedes etiquetarme para que pueda verlo. ¡Me hará mucha ilusión!